Cultura Galega Adiós, ríos; adiós, fontes; adiós, regatos pequenos; adiós, vista dos meus ollos, non sei cando nos veremos. (Rosalía de Castro) Comería a túa alma coma quen come un ovo doce novo, perfecto microcosmos no seu óvalo de nacre. (Estíbaliz Espinosa) Idioma meu, homilde, nidio, popular, labiego, suburbial e mariñeiro, que fas avergoñar ó burgués, ó señorito i o tendeiro. (Manuel María Fernández) Ás veces fáltannos palabras e ás veces sóbrannos, ás veces fáltanos o tempo de dicilas e ás veces pásanos o tempo de calalas. (Baldo Ramos) Os soños cantan coa gorxa xeada, como esclavos fan tocar os tambores. (Manuel Rivas) Mexan sobre nós e temos que dicir que chove. (Castelao) Díxenlle á rula: Pase miña señora! E foise polo medio e medio do outono por entre as bidueiras sobre o río. (Álvaro Cunqueiro)

Petroglifos en Villestro (Santiago de Compostela)


La historia está llena de descubrimientos en los que la casualidad ha tenido mucho que ver. Este es el caso, en parte, del hallazgo que el colectivo cultural A Rula ha hecho en la parroquia de Villestro (Santiago de Compostela), en el lugar de A Portela, cerca del Camino de Fisterra.

Por esta zona, de la que ya tenía constancia de su importancia prehistórica, paseaba Luis Leclere, presidente de A Rula, con su perra Loba, que eligió una piedra para descansar. Y esa roca, ahora catalogada por la asociación como uno de los petroglifos de San Miguel, forma parte de al menos una veintena de piedras con símbolos de arte rupestre en una concentración tal que según sus descubridores es el conjunto neolítico más importante de Santiago, y posiblemente también de toda la comarca.

Petroglifo de San Miguel en Villestro, Santiago de Compostela

Tras el hallazgo, al que la asociación A Rula llegó tras localizar otros restos en una zona cercana, los arqueólogos del colectivo se pusieron en contacto con otros expertos, que confirmaron la trascendencia del hallazgo.

Petroglifo de San Miguel en Villestro, Santiago de Compostela

Este grupo cultural resalta que parte del patrimonio prehistórico de la zona permanece oculto por la maleza y hasta por los escombros. Y para el que se ve, lo cierto es que es necesaria una mirada mínimamente experta, aunque cuando cae la noche los dibujos se perciben con muchísima más nitidez.
En las piedras de A Portela abundan desde los diseños más toscos, a diseños de etapa de la dominación romana e incluso la Edad Media. Una de las particularidades son los dibujos rectangulares, que no son muy habituales en el arte rupestre.

Petroglifo de San Miguel en Villestro, Santiago de Compostela, visto por la noche

Cultura Galega te cuenta todas las curiosidades de Galicia. No dudes en suscribirte, descargarte nuestra APP y compartirlo con todos tus amigos.



-